El 7 es una energía introspectiva, que trae un tiempo de autoconocimiento. Es un año que nos llama a observar nuestras vidas y tomar decisiones: ¿cuáles son las decisiones que hemos tomado hasta ahora que nos llevaron a donde estamos ahora? Y, lo más importante, ¿qué decisiones debemos tomar para avanzar para llegar a donde queremos estar en los próximos 5 años? Pueden surgir situaciones en las que se nos llame a tomar decisiones rápidas; es importante mantener el enfoque en el objetivo general y evitar enredarnos en los detalles.
Este año, la vida nos brinda la oportunidad de liberar responsabilidades que habían representado una pesada carga en el pasado. Estamos llamadxs a romper con los prejuicios y las reglas obsoletas, buscando el progreso y la expansión en nuestra vida.
Nos sentiremos más introspectivxs que en otros años, necesitados de soledad para reflexionar. Está bien validarnos y tomarnos el tiempo y el espacio necesarios para analizar los caminos que podemos seguir. Es aconsejable aterrizar y calmar nuestra mente con actividades como la meditación, el estudio y estar en la naturaleza.
Debido a que el 7 tiene que ver con el compromiso, es un momento excelente para todo lo que representa el papeleo y los asuntos legales. Las firmas de documentos, contratos, acuerdos y negociaciones duraderas son auspiciosas este año.
El año 7 es una llamada para ampliar nuestros conocimientos. El 7 dice «no creas que ya lo sabes todo; siempre hay más para aprender”. Una clave fundamental este año es continuar nuestra educación y ampliar nuestro conocimiento: cuando aprendemos bajo esta energía, se abren ante nosotros grandes puertas y oportunidades que antes no podíamos ver. Todo el conocimiento y la especialización que adquieras este año te dará las herramientas que utilizarás más adelante para lograr tu visión y metas.