Un año 2 es aquel que nos llama a trabajar en nuestras relaciones. El año pasado fue de nuevos comienzos, de nuevas energías que entraron en nuestra vida y nos acercó a nuestra independencia e individualidad. Ahora llega este año y nos llama a mirar a quienes nos rodean, trabajando en nuestros vínculos.
Es un período en el que nuestras relaciones serán un tema central. El 2 es el «par» y nos pide que aprendamos a relacionarnos desde una perspectiva más elevada: respetando la individualidad e independencia de cada uno, para tener lazos de mayor vibración. Estamos llamados a revisar nuestras relaciones personales y preguntarnos: ¿cómo puedo traer más sanación? ¿Cómo puedo aportar más de mi presencia e intención?
Un año 2 es un tiempo que trae conexiones importantes. Las personas que vienen a ayudarnos a avanzar en la vida suelen entrar en nuestras vidas bajo esta energía, por lo que es importante estar atento a las nuevas personas que encontramos, ya que pueden ser muy importantes en los años venideros. El 2 nos llama a trabajar en equipo. Las alianzas y asociaciones son especialmente afortunadas este año. El proyecto que ha iniciado necesita más manos y esta es la mejor energía para pedir ayuda. Este período de la vida nos enseña a aprender a RECIBIR. La vibración de este año es extremadamente productiva; podemos lograr una mejora económica gracias a proyectos exitosos en los que hemos estado trabajando. Existen grandes posibilidades de ser invitados a formar parte de una sociedad o grupo en el que podamos desarrollarnos y crecer. Cualquier unión o fuerzas servirá como trampolín para lograr las metas que nos hemos propuesto; Sentiremos una mayor confianza en nosotros mismos y veremos cómo se van acomodando las cosas para que podamos evolucionar.